maig 19 2009
Julieta Andrea Hain
No había pensado nunca antes en que pudiera tener una biografía lingüística. Ser consciente de ello ahora me emociona y me perturba. Jamás había reflexionado sobre lo interesada que había estado en los idiomas y sobre lo que ha significado en mi vida. No pretendo aquí hacer una lista de las lenguas que conozco, sino de los descubrimientos que he hecho al respecto.
Decía un teórico latinoamericano, que muchas veces estamos colonizados/as, más que de hechos, de cabeza, que muchos/as estamos mentalizados/as para reconocer solo lo que se impone; una muestra clara de eso en mí, es que cuando hablaba de América, el continente donde vivo, siempre pensé que se hablaban 3 idiomas, castellano, portugués e inglés, con algunas pequeñas superficies de francés… pueden ver lo equivocada que estaba!! y es raro porque estuve interesada en otros idiomas cuando niña pero nunca los visualice como tal. Luego revisamos en clases el “Lingua Món” y había ahí una lista de siete páginas de lenguas habladas en este continente que yo presumía conocer tan bien (ver la referencia aquí) el hacer ese recorrido me hizo observar lo fuerte de que a un idioma lo llamen “lengua oficial”, porque claro, eso nos hace contar mal, ya que justamente restamos más de lo que sumamos.
Han escuchado la frase “de que el miedo paraliza”, o la impresión en este caso, para ser mas especifica, esa fue la primera reacción al llegar a Cataluña, como yo venía como estudiante a España donde se habla “Español” y como cuando había venido en plan turista no me entere de nada, el shock fue grande cuando en clases habían sonidos que no había escuchado antes, punto crucial para comprender ahora la mala actitud que tuve, es vergonzoso, pero así fue, que rabia tenia. Un día me senté solo a pensar porque me pasaba esto, a tratar de comprender, la verdad es que todavía no lo tengo muy claro, pero se suman algunas cosas como, el desconocimiento, las actitudes poco tolerantes de algunas personas, mi propia intolerancia, la sensación de estar en un lugar donde se me imponía algo que yo no había escogido, etc. y claro estaba paralizada; otra de las posibles reacciones hubiera sido la indiferencia, pero hay otro refrán que usamos en Chile y que dice “a lo hecho pecho”, o sea que si ya estaba acá tenía que hacer algo para vivirme esta situación y no ser indiferente a ella. No crean que fui radical ni nada, ni tampoco crean que fue de un día para el otro. Lo primero fue ir a un taller de dos horas de Intercomprensión de Lenguas Románicas, gran descubrimiento!, tenemos más en común de lo que me imaginaba, descubrí que lo importante es que nos podamos entender y que además era posible hacerlo. Luego me inscribí en el curso de comprensión básica de Catalán y bueno aquí estoy escribiendo mi historia. En ese curso reflexione mucho, con la ayuda de la profe, Anna y mis compañeras/os, entendí que idioma es mucho más que eso, y además pude ver las similitudes históricas con personas de otros países y cómo la lengua ha tenido un papel preponderante en esos hechos. Compartir experiencias en ese contexto fue muy enriquecedor, lo bueno es que como cada uno hablaba su lengua pude comprobar en vivo que eso de la intercomprensión es posible y además amable y respetuoso.
Mi vida ha estado rodeada por lenguas como el castellano, el alemán, el mapudungun, el portugués, italiano, inglés, francés, catalán, y danés, me alegro de poder decir esto, porque la primera vez que me preguntaron en el curso de comprensión básica, creo que solo dije castellano, inglés y algo de portugués. Ahora compro libros en otros idiomas románicos, porque sé que los puedo leer. Ahora espero que la gente me hable en su lengua porque sé que lo puedo entender.
Para seguir con los refranes, hay uno que dice “de la rabia al amor hay un solo paso”, uf! Que puedo decir de eso, el camino fue primero atreverme a escuchar, luego conocer, comprender y lo más importante tener una actitud diferente a la anterior, lo bueno de los cambios de actitud es que movilizan.
Como las biografías son dinámicas, recursivas, re-escribibles y re-pensables, seguiré analizando y añadiendo y sacando datos de lo que hoy les cuento, por ahora solo les puedo decir que una de las cosas que tiene mi mente ocupada es pensar en cómo las lenguas pueden ser un punto de unión y no de división, eso la verdad me preocupa. No tengo hasta el momento ninguna respuesta, pero estoy en ello así que si alguien sabe algo o tiene una sospecha los/as invito a compartirla.